Kalliope Skin Repair Intensive es una loción a base de una combinación específica y equilibrada de aceite de palma roja, ácido hialurónico y ceramidas, aceite de jojoba,extractos de Aloe barbadensis, extractos de hojas de olivo, y palmitato de ascorbilo (forma liposoluble de la vitamina C).
Kalliope Skin Repair Intensive contrarresta los efectos nocivos de la contaminación, el estrés o la fatiga, y aporta un brillo positivo a la piel. Se recomienda para preservar las propiedades funcionales de la piel del rostro, el cuello y el escote.
Kalliope Skin Repair Intensive utiliza una combinación de seis sustancias naturales que tienen en cuenta las necesidades específicas de la piel del rostro, el cuello y el escote. El aceite de palma roja sostiene todos los compartimentos de la piel: epidermis, colágeno/elastina, vasos y células dérmicas. El ácido hialurónico, con su acción mecánica, sostiene la dermis y mantiene los niveles de hidratación, contribuyendo a mantener el tono de los compartimentos de la piel. El aceite de jojoba contrarresta la acción de los agentes agresivos que se acumulan diariamente en la superficie de la piel. Los extractos de Aloe barbadensis (Aloe vera), que se caracterizan por un elevado contenido de sacáridos de aloe (como mananos, galactosa o ácidos galacturónicos), tienen acciones inmunoestimulantes y depurativas, mientras que los componentes de aloeresina tienen una fuerte acción antiinflamatoria. Los extractos de hoja de olivo contribuyen a la acción antioxidante del aceite de palma roja gracias a su contenido en oleuropeína. Por último, el palmitato de ascorbilo (forma liposoluble de la vitamina C) aporta luminosidad a la piel y contribuye a la síntesis de colágeno.
La reparación de la piel se produce mediante procesos complejos que requieren tiempo, basados en acciones de limpieza y regeneración de la piel. La acción limpiadora de la piel es la “acción cosmética fundamental”, y tiene en cuenta las características bioquímicas e histológicas de la piel. Un detergente de alta calidad no puede ser un simple “desmaquillador”, sino que debe respetar las características de la piel y su función de barrera, preservando la llamada “pérdida de agua transepidermica”, que es responsable de una pérdida excesiva de agua. La acción limpiadora debe ir acompañada de acciones protectoras y reparadoras que ejerzan un verdadero efecto de cuidado de la belleza y relaje la piel aportando suavidad, salud y luminosidad. Hay varias sustancias naturales capaces de proteger estas funciones, pero deben combinarse de una forma específica y equilibrada para que sean eficaces.